La seguridad a nivel nacional se ha visto amenazada en los últimos días, siendo las instituciones educativas un blanco fácil para grupos delincuenciales y ladrones ocasionales. La Universidad Católica de Cuenca ha enfrentado estos problemas en cada uno de sus campus, tanto en la ciudad de Cuenca, como en los demás lugares en donde tiene presencia: Azogues, Cañar, La Troncal y Macas.
Para el efecto, Enrique Pozo Cabrera, rector de la Universidad Católica de Cuenca, se reunió con el coronel Walter Villarroel, Comandante de la Zona 6 de la Policía Nacional. En la cita abordaron las necesidades de seguridad que afectan a la universidad en todos sus campus.
«Aunque la problemática en la provincia del Azuay se sitúa en un nivel medio, es imperativo abordarla debidamente, ya que nuestros estudiantes, docentes y personal administrativo están siendo vulnerados a pesar de los diversos controles que realiza la Policía Nacional», señaló Enrique Pozo.
Dentro de Cuenca se han identificado problemas en sectores como el Hospital Universitario (Barrio El Vecino), Unidad Académica de Ciencias Económicas y Empresariales (Parque San Blas), Unidad Académica de Ciencias Sociales (Parque Víctor J Cuesta) y La Estancia Luis Cordero “El Grande”, Posgrados (Barrio Uncovía); estos sectores se encuentran colindando con negocios que expenden alcohol de manera irregular y durante altas horas de la noche, los delincuentes aprovechan la vulnerabilidad de los estudiantes para sustraer sus pertenencias.
La Policía Nacional solicita a las autoridades universitarias la colaboración de la seguridad privada de la institución y la creación de puntos focales en cada campus. Estos puntos permitirán coordinar horarios y establecer resguardo policial en momentos específicos.
Ambas instituciones acuerdan y enfatizan la importancia de fomentar la responsabilidad social entre los estudiantes como parte esencial de la solución, promoviendo valores, principios y corresponsabilidad en los estudiantes.
La Policía Nacional, en colaboración con otras entidades pertinentes, se compromete a abordar con urgencia estos problemas de seguridad. Se espera una colaboración activa de la comunidad para lograr un entorno más seguro y protegido para todos.
