José Solano Peláez, experto en gestión de residuos sólidos y docente investigador de la Universidad Católica de Cuenca, participó como uno de los consultados por Revista Vistazo para abordar el tema “La eterna emergencia de la basura” en su última edición.
Esta problemática que se suscita en la capital de la república, también se produce a escala nacional, una vez que, a decir del análisis del medio de comunicación, “la generación de 13 mil toneladas diarias de desechos en el país es incontrolable y requiere medidas urgentes”.
El docente – investigador, menciona que el Ecuador tienen un serio problema en el manejo de los residuos y que se refleja en el particular caso de Quito, que por ser capital del país y a pesar de los recursos que esto supone, no ha logrado consolidar un sistema eficiente del manejo. Luego, en los cantones con recursos limitados la situación no es alentadora. Existe la preocupación porque este tema trae consigo problemas de saneamiento ambiental y de salud pública, generados principalmente por el colapso de los sitios de disposición final.
Considera que, de acuerdo a la legislación ecuatoriana vigente y como política de estado se delimita el modelo de manejo como la Gestión Integral de Residuos Sólidos que direcciona el trabajo de disposición final con rellenos sanitarios, mismo que con el tiempo nos ha llevado a una seria reflexión por su poca eficiencia y a repensar alternativas basadas en experiencias exitosas de Economía Circular y Basura Cero que rompen el típico sistema enteramiento de basura y procura el aprovechamiento al máximo de los residuos.
“La mejor basura es la que no se genera”, sostiene José Solano Peláez. Además, agrega que siempre se tendrán residuos sólidos, como una característica propia de la humanidad. La idea es darle un tratamiento adecuado, que inicia con la clasificación orgánica e inorgánica en los hogares, establecer procesos a nivel de los municipios para la recolección selectiva de residuos sólidos, la dignificación del trabajo de las y los Recicladores de Base, implementar sistemas eficientes de compostaje y subclasificación de residuos inorgánicos como medida para la reinserción en la cadena de valor y finalmente una toma de conciencia por parte de la población respecto del consumismo. (FS/YS).
